jueves, 30 de mayo de 2019

TE HIZO, TE SOPORTA, TE LLEVA Y TE GUARDA

Y hasta la vejez yo mismo, 
y hasta las canas os soportaré yo;
yo hice, yo llevaré,
yo soportaré y guardaré.
Isaías 46:4.


Dios no se cansa de ti, Dios no se cansa de cuidarte, Dios no se cansa de protegerte, lo ha hecho hasta hoy y lo seguirá haciendo. No importa si ya estás peinando tus canas, Dios te sigue cuidando como su niño consentido, el verbo soportar, significa que Dios te lleva cargado, no serás tú quien tenga que hacer la fuerza porque Él la hará toda por ti, Él sí puede soportar todo el peso de las cargas que hoy llevas a cuestas, así que puedes confiar en que no estás solo librando esta batalla.

Además, Dios, el Creador, te hizo, no para dejarte tirado en el camino sino para vivir contigo y apoyarte en todo lo que necesites, no para ocuparse durante un tiempo y ya, sino para estar a tu lado siempre, hasta que estés viejito, Dios, el mismo que hizo los cielos y la tierra, se hace responsable de ti, no te va a abandonar, no va a descuidar la obra de Sus manos. Un día el Padre Celestial decidió hacerte para tomarte siempre en Sus brazos de amor, Dios se encarga de alzarte cuando hayas caído, es más, este llevarte también implica que está dispuesto a perdonarte cuando confiesas tus pecados, no te va a desamparar, no hay nada que pueda hacer que Él se aleje de ti, Él no puede faltar a Su Palabra, ya lo prometió y no va a fallar. 

Dios no solo ha estado dispuesto a hacerte, a soportarte y a llevarte, también te guardará, quiere decir que te libra de lo que te ha querido tener preso, Dios rompe cadenas que en tu vida te están impidiendo sentir Su protección, así que no tiene sentido que vivas de otra forma que no sea la libertad que tu Padre te ha prometido.


lunes, 20 de mayo de 2019

PRIMERO LA OBEDIENCIA

Por eso, cumplan todos los mandamientos que hoy les mando, 
para que sean fuertes y puedan cruzar el Jordán
y tomar posesión de la tierra.
Deuteronomio 11:8

Con Dios primero es la obediencia y luego la bendición; el Señor te está pidiendo obediencia absoluta, todos sus mandamientos los ha dejado para protegerte y para fortalecer tu carácter mientras llega ese milagro por el que has orado. 

Si lees todo Deuteronomio 11, vas a encontrar que el Señor les hace un repaso de lo que podría suceder si deciden andar por su propio camino y les recuerda las maravillas que Dios ha hecho a favor de su pueblo, por eso cuando tengas dudas respecto a obedecer, mira hacia atrás, recuerda las consecuencias de tu rebeldía y haz memoria de lo que ha sucedido cuando decides escuchar la Voz de Dios; Él hace milagros, Él va a respaldar tu fidelidad, no te dejes desanimar si en principio pareciera que no tiene sentido, sigue perseverando en lo que Dios pide que hagas y Él se encargará de retribuirte, a Su tiempo y a Su manera.

De verdad tu Padre quiere lo mejor para ti, quiere prolongar tu vida, que sea abundante, productiva, de fruto, pero recuerda, la bendición solo va precedida de obediencia.

Ten presente que Dios te está diciendo que la fortaleza que necesitas la vas a hallar en la obediencia, haz una oración sincera preguntándole qué quiere que hagas, qué decisiones debes tomar, qué debes abandonar o qué debes conservar, esta oración debe ir acompañada de la firme decisión de obedecer sin importar qué tanto te guste la respuesta, puedes confiar porque la obediencia te prepara para las batallas que en adelante librarás ya que no estarás peleando en tus fuerzas sino descansando en el Señor.

Dios te está dando hoy a elegir entre la desobediencia que lleva la separación de Dios y de su protección o la obediencia que te llevará a tomar posesión de aquello que ya te ha prometido. 

No desesperes, Él lo dijo, Él lo hará


SIN MIEDO

Cuando siento miedo,  pongo en ti mi confianza Salmo 56:3 Aún en medio de las batallas, David seguía alabando a Dios y tenía el tiempo para ...