miércoles, 24 de diciembre de 2014

DAR DE LO RECIBIDO

...Y enojado, su señor lo entregó a los carceleros para que lo torturaran hasta que pagara todo lo que debía. Así también mi Padre celestial los tratará a ustedes, a menos que cada uno perdone de corazón a su hermano.
Mateo 18:34-35

En Mateo 18:21-35 se relata la Parábola del siervo despiadado a quien se le perdonó una gran deuda pero que luego no perdonó a quien le debía mucho menos, es triste ver que no fue capaz de dar la misericordia que si recibió, la enseñanza es que Dios no pide algo que previamente no haya dado, por el contrario, el Señor demanda aquello de lo que ha entregado de sobra, en este caso, el perdón. 
Se podría decir que este hombre fue un descarado, un desconsiderado, un abusivo, pero no es diferente a lo que muchos hacen, han pedido perdón a Dios por sus pecados y lo han recibido, sin embargo les cuesta perdonar, les cuesta entender las faltas del otro, les cuesta tratar con misericordia a quien se equivoca.
Ante la ofensa se pueden tener muchas reacciones, sin embargo lo normal sería dar de lo que hemos recibido de parte de Dios, esto es perdón, reconciliación y la intención de ayudar a quien se está equivocado, pero lo normal es atender la ofensa con recriminaciones, reclamos, insultos y exigencias de derechos, contrario a lo que nuestro Buen Padre nos da cuando pedimos perdón.
Cada vez que te ofendan recuerda que Dios ya te ha perdonado, aún antes de que te pidan perdón decide perdonar, esto hace tu caminar más liviano, libre de cargas y resentimientos, no olvides que el Señor acepta tu arrepentimiento y eso te hace una persona perdonadora en potencia.

viernes, 19 de diciembre de 2014

UN FRUTO AMARGO

 Busquen la paz con todos, y la santidad, sin la cual nadie verá al Señor. Asegúrense de que nadie deje de alcanzar la gracia de Dios; de que ninguna raíz amarga brote y cause dificultades y corrompa a muchos;
Hebreos 12:14-15

Hay consejos que realmente pueden cambiar nuestra vida si realmente los escuchamos y lo que la Palabra de Dios nos dice hoy tiene un gran impacto no solo en nosotros, sino en la vida de quienes nos rodean, la idea no es ser mundos perfectos aislados sino buscar la paz con quienes tenemos cerca, mientras esté en nuestras manos hagamos la paz con todos, si es necesario pidamos perdón, perdonemos, dialoguemos, no demos por hecho, renunciemos a nuestro derecho al enojo y en ocasiones tendremos que pasar por alto la ofensa. 

El rencor es un dañino sentimiento que constituye la semilla para la amargura, su fruto es agrio, no ofrece deleite ni el más mínimo gusto, por el contrario, lleva a la soledad, a que todo el mundo nos evite, a que lastimemos a quienes más nos aman, a dañar a nuestras generaciones venideras y muchas consecuencias más que no alcanzamos a dimensionar, además no solo complica nuestras relaciones interpersonales sino que también estorba nuestro caminar con Dios, un corazón amargado no podrá disfrutar de la gracia que Él ofrece porque no está interesado, la amargura nos aleja de la presencia del Señor

Observemos una persona amargada y notaremos que considera que, pese a que se cree autosuficiente e independiente, en realidad tiene profundos sentimientos de soledad, siempre se cree incomprendido porque simplemente está convencida de que no hay nada ni nadie que pueda hacerla feliz, ni siquiera el Señor, siempre estará pendiente del error ajeno y le molestará la felicidad del otro, vivirá pendiente de lo que no tiene o no ha alcanzado y no agradece lo que ha conseguido, le será más fácil ver cualquier posibilidad negativa en cualquier escenario y hará lo posible para contagiar de su amargura a quienes se encuentran cerca.

Si te has dado cuenta que eres amargad@ pídele al Señor que a través de su Espíritu Santo llene tu corazón de gozo y aprende a dar gracias por las bendiciones que hasta hoy has recibido.



lunes, 1 de diciembre de 2014

SOLDADOS ENREDADOS

Ningún soldado en servicio activo se enreda en los asuntos de la vida civil, porque tiene que agradar a su superior.
2 Timoteo 2:4

La vida militar es de admirar por varios aspectos, en lo personal me gusta la disciplina y el respeto por la autoridad, sin embargo no creo que sea nada fácil asumirla porque lleva una alta cuota de sacrificio, por ejemplo en lo familiar, los militares son trasladados, trabajan lejos de su familia, se exponen al peligro, por mencionar algunos aspectos; así que quien está en un ejército debe amar profundamente su labor para estar dispuesto a pagar el alto precio.
Los militares son un ejemplo usado en la Palabra de Dios. Particularmente en el pasaje de hoy se usa para hablar de la consagración exclusiva al Señor. Seguir a Dios tiene un costo, el precio a pagar es dejar de enredarnos en asuntos que no tengan que ver con el Señor para no desagradarlo.
Seguro te estás preguntando ¿qué es enredarse en los asuntos de la vida? Pues bien, es dedicar mis fuerzas, mis pensamientos, mis obras a lo que es ajeno a Dios, enredarse en los asuntos de la vida es pensar que tu trabajo es lo más importante, que tienes que vivir para agradar a tu familia, espos@, hij@s, novi@, jefe, amante, padres o cualquier otra persona importante para ti, es hacer de tus preocupaciones el centro de tu vida, es distraerte con aquello que el mundo pinta como deslumbrante y no detenerte a considerar la voluntad de Dios para ti.
El propósito de tu vida debería ser agradar a Dios, Él es tu superior, Él está esperando lo mejor de ti, si has decidido engrosar las filas del ejército del Señor podrás tener por segura la victoria pero debes pagar el precio, deja de enredarte en los asuntos de la vida, ellos son pasajeros, finitos, temporales, engañosos.
Concéntrate en Dios y su Palabra, allí encontrarás la mejor forma para ser excelente soldado.

martes, 25 de noviembre de 2014

DIOS DARÁ

Daré de beber a los sedientos y saciaré a los que estén agotados.
Jeremías 31:25

Si estás pasando por un momento difícil de tu vida no te desanimes porque Dios conoce tu condición y no te va a dejar ahí mismo, el tiempo presente de aflicción no es el final, al contrario, puede ser el principio de la bendición que el Señor tiene para ti y para tu familia.  Considera que en medio del desierto has hallado su gracia porque su misericordia es eterna, Dios no va a dejarte sufrir más de lo necesario porque Él es amor.

Reflexiona hoy y ten presente que el Señor se va a encargar de edificarte y de adornarte con preciosos regalos como el gozo, la paz, la paciencia, la esperanza y la humildad. Si has perdido algo o a alguien nuestro Padre sabrá recompensarte o restituirte, pero no te dejará igual, Dios no es estático, es dinámico y cada movimiento lo usa para bien que quienes le amamos, así dice Romanos 8:28.  Teniendo la plena convicción de su Paternidad podrás estar seguro de que nunca estarás solo, Dios quitará tu dolor y en cambio pondrá alegría en tu corazón, Él mismo se encargará de consolarte para que des paso a la provisión de Dios para tu corazón.

Dios siempre da esperanza, con Él puedes estar seguro que todo tiempo futuro será mejor, en medio de la tristeza toma un momento para evaluarte y analizar qué hiciste mal, dónde fallaste, no para llenarte de culpa sino para reflexionar aquello en lo que debes mejorar, reconocer el error, asumir la consecuencia y apelar a su misericordia para volver a empezar. Si eres consciente de tu impotencia y de tus equivocaciones lo único vas a recibir del Señor es perdón y limpieza, ahora Él con Su Palabra va calmar tu sed y a saciar tu agotamiento.

lunes, 10 de noviembre de 2014

CARA-DURA

Por cuanto el Señor omnipotente me ayuda,
no seré humillado.
Por eso endurecí mi rostro como el pedernal,
y sé que no seré avergonzado.

Isaías 50:7

El Señor siempre va a estar dispuesto a ayudar, Él es amor, apoyo, bondad, no puede hacer lo contrario porque sería ir en contra de su naturaleza, sin embargo uno de los mayores cuestionamientos que recibe el cristiano es ¿porqué Dios permite el dolor a quien cree en Él, le sigue y le sirve? Son variadas las respuesta pero hoy me limito a lo expuesto en el versículo, el dolor tiene el propósito divino de fortalecer, templar el carácter, endurecer, entiéndase acá endurecer como la capacidad para ser más aguerrido y no como insensibilidad. Si todo saliera como se planea se corre un alto riesgo a convertirse en alguien soberbio y no es eso lo que Dios quiere para sus hijos.

Luego de pasar una prueba el carácter debe estar más firme, si no, tristemente no habrá servido y será necesario un segundo proceso, es como repetir el año escolar. Pero cuando atravieso el desierto de la mano de mi Señor, confío en Su Palabra, creo absolutamente en su presencia y espero su respuesta entonces puedo tener un rostro endurecido que no lo amilana ninguna circunstancia, es ahí donde podré ver el respaldo del Señor, un respaldo fruto de la confianza en quien todo lo puede.

Recuerda que el Señor consuela en medio de la aflicción y alivia el cansancio, la clave está en confiar independiente de lo que vivo, fe es estar seguro del respaldo de Dios, no para satisfacer caprichos sino para respaldar mi confianza en su buena, agradable y perfecta voluntad.

Esta semana mira de frente tu dificultad y con tu rostro endurecido recuérdale que Dios no te dejará avergonzado.

miércoles, 5 de noviembre de 2014

SEGUIR CONFIANDO

Así que no pierdan la confianza, 
porque ésta será grandemente recompensada.
Hebreos 10:35

Toda esta parte final de Hebreos 10 es un llamado a la perseverancia, un llamado necesario, este camino cansa y es porque esperar agota, sobre todo cuando parece que no avanzas, usar una bicicleta estática cansa y aunque pedaleas no llegas a ningún lugar. Sin embargo a medida que te ejercitas estás perdiendo calorías, mejoras tu estado físico, y logras otros beneficios en tu cuerpo, es decir, aunque no veas adelanto, vas ganando. Muchas veces es así con tu carácter, las dificultades pueden ser una bicicleta estática, que cansa, desgasta y en apariencia no te lleva a ninguna parte, pero interiormente te estás fortaleciendo y vas madurando.


Acá la Palabra de Dios te está llamando a no retroceder, sino a confiar para alcanzar la recompensa que Dios tiene para quienes no desfallecen en su convicción, es un llamado a tener fe en las promesas de Aquel que no falla, aún cuando parece que está demorado. Cuando crees en el Señor estás seguro de que la tribulación presente no es el fin, es el camino, es el entrenamiento, es aguardar con la esperanza de un final feliz que Dios ha dispuesto para ti, recuerda que tu confianza en Dios será grandemente recompensada. Pero hay una condición: no perder la confianza, significa que independiente de lo que suceda en adelante no debes dejar de confiar, esperar, clamar y creer que Dios va a responder a tu favor.

Si Dios habló de no perder la confianza es porque vivirías situaciones que te pondrían a dudar, es aquí donde pruebas la calidad de tu fe.

martes, 28 de octubre de 2014

PONE-QUEJAS

Ante Él expongo mis quejas;
ante Él expreso mis angustias.
Salmo 142:2

Cuando a un niño se le dice que es pone-quejas no es un halago, por el contrario, es un defecto porque se le ve como incapaz de arreglárselas por sí solo, es una señal de debilidad, siempre se le pone quejas a alguien mayor.  Frente a tantas dificultades y momentos angustiosos en nuestra vida tenemos a quien ponerle quejas, a quien es superior para ayudarnos, ponemos quejas cuando no somos capaces de enfrentarnos al enemigo y así deberíamos pensar sobre lo que nos sucede, hay situaciones que no podemos manejar y la solución no es quedarnos así no más, debemos tomar acción y en ocasiones la única acción es acudir a Dios y exponer todo lo que nos sucede, expresarle toda nuestra angustia.



Muchas veces hacemos de las personas botes de basura quejándonos, demandando, exigiendo, perdemos tiempo para amarlos y sólo nos concentramos en nuestras exigencias, esto es absolutamente inútil porque nuestros seres queridos no puede ayudarnos simplemente porque son humanos, finitos, limitados como nosotros, en adelante antes de hablar con alguien sobre tus dificultades exponlas delante del Señor y exprésale a Él tu angustia, en Él vas a hallar reposo, paz y seguramente respuesta, luego, con más tranquilidad puedes hablar con alguien más del asunto para que te apoye en oración, ese es el derecho, así funciona mejor, entre otras porque luego de hablar con Dios va a salir mucho dolor y resentimiento para que no contaminemos a los demás.


Existe cierta creencia a pensar que Dios no está interesado en nuestros problemas cotidianos, que únicamente podemos pedirle por esos milagros extraordinarios o por circunstancias serias de la vida, eso no es lo que dice su Palabra, por el contrario, Él está esperando total sinceridad de parte nuestra, absoluta confianza y fe para creer que cada vez que le hablo Él me escucha.

miércoles, 15 de octubre de 2014

¿SED O INCREDULIDAD?

Toda la comunidad israelita partió del desierto de Sin por etapas, según lo había ordenado el Señor. Acamparon en Refidín, pero no había allí agua para que bebieran, así que altercaron con Moisés.
—Danos agua para beber —le exigieron.
—¿Por qué pelean conmigo? —se defendió Moisés—. ¿Por qué provocan al Señor?
Pero los israelitas estaban sedientos, y murmuraron contra Moisés.
—¿Para qué nos sacaste de Egipto? —reclamaban—. ¿Sólo para matarnos de sed a nosotros, a nuestros hijos y a nuestro ganado?
Éxodo 17:1-3

El pueblo de Israel estaba molesto porque no tenía agua, es una molestia, por decirlo de alguna manera, entendible, estaban en medio del desierto, el sol debía ser inclemente, iban caminando, cansados, era normal que quisieran agua, hasta ahí todo parece bien, cuando uno tiene sed pide algo de tomar, sin embargo el verdadero problema es que la falta de agua evidenció su descontento y desconfianza, no era un problema de sed, era un problema de FE.

Esta situación permitió ver la mala disposición que aún había en sus corazones, la sed los hizo violentos e impacientes, lo cual fue evidente en su lenguaje, en su trato a Moisés, en su desafío a Dios; a lo escrito agreguemos la actitud corporal que debían tener: ceño fruncido, manos en la cintura, y volumen de voz alto, lo anterior solo dejaba ver un pueblo desagradecido, amargado e incrédulo.

Eso precisamente es tentar a Dios, no creer en su presencia, su providencia y su promesa, es desafiarlo, es tratarlo de mentiroso, es reducir el poder del Señor a un momento de dificultad, reflexiona acerca de los momentos de sed en tu vida, porque, al igual que el pueblo de Israel, el sediento desafía a Dios, le reclama, deja de creerle, eso no es lo que espera el Señor, Él quiere un corazón que confía en medio del desierto, que no duda por la sed, que espera y cree que llegará la provisión de Dios, que está convencido que Dios lo ha sacado de un lugar para llevarlo a uno mejor.

La próxima vez que estés en el desierto y tengas sed, no pelees con Dios, sé sincero y dile que estás débil y necesitas su provisión y su aliento, sin duda Él responderá, el Señor no sacó a su pueblo de la esclavitud para dejarlo morir en el desierto, igual pasa contigo, Él no te ha llevado al desierto para matarte, sino para formarte.

Por eso, ahora voy a seducirla: me la llevaré al desierto y le hablaré con ternura. Allí le devolveré sus viñedos, y convertiré el valle de la Desgracia en el paso de la Esperanza. Allí me corresponderá, como en los días de su juventud, como en el día en que salió de Egipto...

Oseas 2:14-15

miércoles, 8 de octubre de 2014

CORAZONES GOZOSOS

Esperamos confiados en el Señor; Él es nuestro socorro y nuestro escudo.
En él se regocija nuestro corazón, porque confiamos en su santo nombre.
Que tu gran amor, Señor, nos acompañe, tal como lo esperamos de ti.
Salmo 33:20-23

El regocijo a menudo está asociado con lo bueno que tenemos o nos pasa, es tener el ánimo alegre, casi nunca asociamos el gozo a situaciones adversas, pareciera que dificultad y felicidad no pudieran vivir bajo el mismo techo, sin embargo, el gozo del que nos habla la Palabra de Dios no tiene nada que ver con la comodidad momentánea, la ausencia de problemas ni con la posesión de todo lo deseado.

Gozo, a la manera de Dios es estar seguros de que el Señor está al control de cada detalle de mi vida, es vivir confiados porque independiente de las circunstancias, Papito Dios está con nosotros, es esperar sin ansiedad, es confiar aunque el momento sea difícil.

Si estamos seguros de que Dios es nuestro socorro y nuestro escudo, entonces ¿porqué temer? Nuestra felicidad no está limitada a lo bueno que podemos estar pasándola, sino a nuestra certeza de la presencia del Señor en cada una de las situciones que podemos estar viviendo, gozo es tomar la decisión de estar bien por la seguridad que nos da el confiar en la presencia de Dios en nuestras vidas.

Una de las evidencias de tener un corazón gozoso es la alabanza a Dios sin importar las circunstancias, es reconocer su grandeza, no porque estemos bien, sino porque Él es Dios, es tener momentos de intimidad, más que de queja, es hablar con Él no sólo para pedir, sino para decirle lo mucho que lo amamos.


Gozo es esperar sin ansiedad el tiempo de Dios para responder a nuestra súplica, es tener un corazón tranquilo y confiado en que la voluntad del Señor para nosotros siempre será la mejor, es no desesperarme porque Dios nunca llega tarde, es no sentirnos solos porque el amor del Señor siempre nos acompaña.

viernes, 3 de octubre de 2014

TU ROSTRO PUEDE VERSE HERMOSO

 En la enfermedad, el ánimo levanta al enfermo;
¿pero quién podrá levantar al abatido?
Proverbios 18:14

Muchas veces deterioran más las enfermedades del alma que las meramente físicas, es diferente vivir una dolencia del cuerpo porque el malestar se puede mitigar con medicamentos, terapias o reposo, de hecho si estamos enfermos pero contentos eso mismo se constituye en el inicio de la recuperación. Pero lo que atañe al alma es más complicado, hay días donde no tenemos motivos para sonreir, al menos eso es lo que creemos, vivimos momentos de dificultad, escasez, angustia, ruptura, incertidumbre y nuestro ánimo se debilita, por más esfuerzo que hagamos no encontramos un aliciente para continuar y el desánimo incluso nos lleva a la enfermedad; es curioso porque si estamos enfermos pero animados podemos aliviarnos con más prontitud pero si tenemos salud con un ánimo abatido terminaremos por enfermarnos, el ánimo y la salud podría decirse, tienen una relación cíclica.

Hoy la invitación es a prestarle especial atención a nuestro ánimo, no dejemos que la temporalidad nos quite la visión de los milagros que Dios quiere obrar a nuestro favor, tal vez los asuntos de la vida no estén saliendo bien, sin embargo en el día más oscuro queda una razón para animarse y es ver como el Señor nos permite otro día de vida, podemos respirar, eso de por sí ya es un milagro, dice Proverbios 15:13: “El corazón alegre hermosea el rostro; mas por el dolor el espíritu se abate”, es un secreto de belleza, es el elíxir de la eterna juventud, lo que tanto se ha buscado Dios yo lo había pensado y está a nuestro alcance, entrega tu alma al Señor, confía en su obra, reconoce tus faltas y pídele que entre en tu corazón y haga de ti la persona que quieres que sea, este será el inicio de una relación de amor y confianza que se reflejará en tu rostro.


¿Quieres verte hermos@? Alegra tu corazón con la presencia del Rey.

jueves, 25 de septiembre de 2014

¿CORRER CON PACIENCIA?

Por tanto, nosotros también, teniendo en derredor nuestro tan grande nube de testigos, despojémonos de todo peso y del pecado que nos asedia, y corramos con paciencia la carrera que tenemos por delante.
Hebreos 12:1


Pareciera una contradicción correr con paciencia; el verbo correr indefectiblemente nos lleva a pensar en afán, cansancio, estar apresurados, agitados, pero la Palabra de Dios hoy le da otro uso y así un diferente significado para nosotros. Correr con paciencia es hacer todo lo que está en nuestras manos pero dejando el tiempo y los resultados en las manos de Dios. 

Quiere decir que Dios tiene una misión especialmente diseñada para cada uno de nosotros, eso entiendo cuando menciona "la carrera que tenemos por delante", significa que hay un futuro para nosotros, que debemos asumir una actitud frente a los retos venideros, es emocionante saber que no vivimos para sobrevivir, sino que Dios ha diseñado planes para nosotros, no siempre será fácil, habrá etapas que perdamos, tal vez nos caeremos y nos lastimemos las rodillas, sin embargo, tenemos motivos para seguir adelante y es saber que nuestro buen Dios ha diseñado un propósito de vida para nosotros, la decisión es aceptarlo y empezar a vivirlo.

Ahora bien, para correr la carrera es necesario estar livianos, ¿alguna vez le ha tocado correr cuando tiene un montón de paquetes en sus manos y un morral en la espalda? ¿es fácil? ¿avanza ágilmente? No. Lo que nos pesa nos resta fuerza, dinamismo y velocidad, en el plano espiritual y de nuestra relación con Dios es igual, antes de poder avanzar en nuestra relación con Dios y en el cumplimiento de su propósito debemos despojarnos de aquello que nos está impidiendo avanzar, lo pequeño y lo grande, es deshacerse de todo lo que desagrada a Dios, no depender tanto de nuestras emociones, sino del Espíritu Santo.

Quitémonos los zapatos y la ropa incómodos y pongámonos los tenis que pesan menos para empezar a correr con paciencia, veremos como Dios despejará el camino y nos indicará por donde debemos seguir.

martes, 16 de septiembre de 2014

EDIFIQUEMOS A LOS DEMÁS

Los fuertes en la fe debemos apoyar a los débiles, 
en vez de hacer lo que nos agrada.
Cada uno debe agradar al prójimo para su bien, 
con el fin de edificarlo.
Romanos 15:1-2


Muchos de nosotros nos creemos fuertes en la fe, nos vemos como mejores cristianos que las personas cercanas y tal vez lo seamos, pero no debemos quedarnos en nuestra "santidad" sino que debemos apoyar a quienes vemos más débiles en su fe, no tiene sentido seguir engordando nuestro cristianismo sino no hay un proceso de edificación a nuestro prójimo. Apoyar al débil es responder a la agresión con el amor de Jesús, es no pelear con quien maltrata sino entregar perdón aún inmerecido, ese fue el ejemplo de Jesús, Él es mi esperanza, mi aliento en cada actitud y decisión. En la Cruz Jesús no oró por venganza ante la horrorosa e injusta muerte que sufría sino que intercedió por quienes lo mataban, eso es amor por el otro.

Hay algunas maneras prácticas de "apoyar a los débiles", es decir, a quienes consideramos tienen una fe más débil que la nuestra:

  • No es necesario tener discusiones para demostrar que tenemos la razón, en ocasiones es mejor ceder como parte del apoyo de quienes aún no están bien cimentados en el mensaje de salvación de Jesús.
  • A veces es menester hacer demostraciones de amor a otros que les agraden y alegren el día así creamos que no lo merecen.
  • Apoyemos sin importar si estamos o no de acuerdo, tal vez esa palabra de aliento les demuestre que el amor de Dios que vive en nosotros es mayor al orgullo.
  • En cuanto esté en nuestras manos hagamos la vida de los demás más fácil, no compliquemos a quienes tenemos alrededor.
  • Edifiquemos con nuestro testimonio, recordemos que el ejemplo es la mejor manera de predicar, si hablamos del amor e integridad de Jesús pero nuestras vidas son dobles e inestables generamos desconfianza.


miércoles, 10 de septiembre de 2014

ELIJO OBEDECER

Por eso, cumplan todos los mandamientos que hoy les mando, para que sean fuertes y puedan cruzar el Jordán y tomar posesión de la tierra, y para que vivan mucho tiempo en esa tierra que el Señor juró dar a los antepasados de ustedes y a sus descendientes, tierra donde abundan la leche y la miel. 
Deuteronomio 11:8-9

El pueblo de Israel ya había podido ver obras maravillosas hechas por Dios mismo, ya había sido testigo de las consecuencias de la rebeldía y por eso ya podrían estar seguros de que los actos de desobediencia traerían nefastas consecuencias. Así en este versículo el Señor les invita a una obediencia absoluta a los mandamientos que ya les había dado y es claro al definir las consecuencias de una vida rendida a Él.

Dios pide obediencia absoluta y en este versículo les habla de otra ventaja de considerar sus preceptos: los fortalecería para la dificultad, aún hoy, muchos siglos después esto sigue vigente, la fidelidad al Señor me va a preparar para cruzar los “jordanes” de la vida, que no son pocos, pero una vez los atravieso disfruto de la tierra prometida donde fluye leche y miel, es decir una provisión deliciosa que voy a poder disfrutar.

Cuando las pruebas me toman por sorpresa, débil, sin defensas, corro el riesgo de no pasarla o al menos salir más lastimada, por el contrario, la obediencia me fortalece y prepara mi corazón para la bendición venidera, muchas veces nos preguntamos con desconsuelo porqué Dios no concede mi petición si es buena, no hace daño a nadie o haría feliz a muchos, una de las razones puede ser que no estás preparado, aún es necesario formar tu carácter para que la respuesta no te atropelle, no han sido pocas las ocasiones en que los regalos de Dios se convierten en el yugo que lleva a las personas a alejarse de Él, siendo así por lo menos yo prefiero seguir esperando y que Dios responda favorablemente cuando yo esté preparada para recibir su regalo y aún con la respuesta no alejarme de Él.

Dios nos ha dado a elegir, yo elijo la obediencia para alcanzar la bendición. ¿y tú?


martes, 2 de septiembre de 2014

DIOS ES OPORTUNO

Nosotros, colaboradores de Dios, les rogamos que no reciban su gracia en vano.
Porque él dice: 
«En el momento propicio te escuché,  y en el día de salvación te ayudé.»
Les digo que éste es el momento propicio de Dios; ¡hoy es el día de salvación!
2 Corintios 6:1


En ocasiones pensamos que Dios se está demorando demasiado en darnos una respuesta, creemos que tal vez olvidó nuestra petición, que la pasó por alto o que simplemente está retrasado, eso son suposiciones humanas que hacemos basados en nuestras capacidades, olvidando la Soberanía del Señor.

Lo bueno es que tenemos la Palabra de Dios que nos recuerda nuestros errores y a la vez nos da esperanza, hoy encontramos que El Señor es oportuno para escuchar nuestro clamor. Su misericordia no llega tarde, tampoco antes de tiempo. Él ya sabe cuándo y cómo va a responder a nuestra oración, lo mejor es tener paciencia porque Él ya escuchó, el problema es que nosotros no entendemos el tiempo de Dios porque es perfecto y nosotros no lo somos.

Que nosotros estemos quietos y no estemos viendo la obra no significa que Dios esté paralizado o que no le interese, Su trabajo es tan maravilloso y perfecto que sólo hasta que humanamente pueda ser revelado Él espera para no estropear el proceso.

Dios sabía cuándo debíamos conocerlo.
Dios sabía cuando íbamos a abrirle nuestro corazón.
Dios sabe el momento oportuno para recibir la respuesta.
Dios sabe con cuántos asuntos debemos lidiar hoy.

¡Qué lindo saber que Su proceso no se limita a la salvación!


Dios va más allá, Él quiere cumplir nuestros anhelos más profundos, lo importante es descansar en Él y creer sin dudar que va a seguir haciendo la obra en nosotros.  Vivamos el día de hoy como lo que realmente es: un regalo del Señor, una oportunidad para ver su gloria en nuestras vidas, es un día más para disfrutar de su creación y un día menos para recibir respuesta a lo que tanto hemos pedido confiando en que es la mejor respuesta porque Su Voluntad es buena, agradable y perfecta.

miércoles, 27 de agosto de 2014

ANTÍDOTO CONTRA EL EGOÍSMO

Doy gracias a mi Dios siempre que me acuerdo de vosotros, orando siempre con gozo en cada una de mis oraciones por todos vosotros, por vuestra participación en el evangelio desde el primer día hasta ahora, estando convencido precisamente de esto: que el que comenzó en vosotros la buena obra, la perfeccionará hasta el día de Cristo Jesús.
Filipenses 1:3-6

Desde hace algunos días vengo intercediendo, más de lo acostumbrado, por las personas cercanas y sus peticiones, he entendido que ver la necesidad del otro es un buen antídoto contra el egoísmo pues así la oración no se centra en mi queja ni en mi petición, sino en la situación ajena y la intención de poder ayudar, en muchas ocasiones la única ayuda útil que puedo ofrecer es la oración, muchas otras encuentro también la manera de colaborar de manera visible y eso además de fortalecer al otro, me fortalece a mí.

Vale la pena aclarar, sin decir que eso sea malo, que no oro por la paz del mundo, porque las personas tengan alimento o porque todos sean felices; oro por peticiones específicas que amigos y conocidos han compartido conmigo. Eso sí, mi primera súplica es que conozcan a Jesús, el Salvador y le permitan entrar en sus corazones e instalarse en el trono de sus vidas.

Si miramos el versículo de hoy Pablo da gracias a Dios por la vida de aquellos que han decidido aceptar el mensaje del evangelio y le han permitido a Jesús obrar en sus vidas, esa es la primera invitación de hoy: orar por aquellas personas que han decidido entregar sus corazones a Jesús, cuando pienso en aquellos a quienes he compartido el mensaje del Evangelio y han recibido con alegría es imposible sentir en el corazón regocijo, gozo por saber que participé en el cambio de vida de alguien, además, lo que más me llena de alegría es saber que Dios no se va a limitar a presentarse esa persona, sino que adicionalmente día a día hará su obra en ella y con el tiempo podré ver la mano del Señor en la vida de alguien a quien estimo, qué importa si por el momento veo a alguien duro de corazón, cruel, egoísta, mentiroso, vacilante, finalmente está en el taller del Maestro y esa obra que comenzó la llevará a feliz término.


La segunda invitación hoy es a que empieces a orar más por los demás, eso ensancha tu mente y te sacará de la egolatría que tanto daño hace, pregunta a tus conocidos cuáles son sus peticiones, interésate en los procesos de los demás, dejar por un momento de mirarte y considera a quienes están cerca.

jueves, 21 de agosto de 2014

DECISIONES DE VIDA

Señor, hazme conocer tus caminos;  muéstrame tus sendas.
Encamíname en tu verdad, ¡enséñame! Tú eres mi Dios y Salvador;
¡en ti pongo mi esperanza todo el día!
Salmo 25:4-5

Hoy tengo un pensamiento que ronda mi cabeza y me lleva a tomar una decisión: ante la adversidad lo mejor es levantar mi alma a Dios porque acá abajo no hay mucho que ver, no se trata de un conformismo mediocre, por el contrario, es una declaración de fe y esperanza, lo mejor entonces es confiar en Dios y entregarle, una vez más, mi vida. ¿Qué importa cuántas veces lo he hecho? Nuevamente le digo que me tome de su mano, me permita conocer sus caminos, me muestre su senda, me encamine en su verdad y me enseñe, hoy vuelvo a decirle: Dios tú eres mi esperanza para toda la vida.

En vez de quejarme, creo.
En vez de mirar el problema, miro a Dios.
En vez de considerar lo que las personas dicen, recuerdo las promesas del Señor.
En vez de alejarme de Jesús, busco pasar tiempo con Él.
En vez del letargo de la pereza, decido servir.

En este transitar mi oración hoy es: Dios hazme conocer tu camino, un camino que lleva a la plenitud. Hay carreteras en mi país que están en muy mal estado, pero el destino es hermoso y cuando llegamos podemos decir, valió la pena el viaje, igual con Dios, el camino parece incómodo pero siempre con Dios lo mejor está por venir. Que el Señor nos muestre su senda, una senda que es perfecta aunque hoy parezca carretera destapada, me concentro en que Dios tiene la visual total, amplia, Él es Soberano y tiene la perspectiva y metas correctas para mi vida y para las personas que amo, así que mi futuro no me preocupa porque está en las mejores manos.

En Dios pongo mi esperanza no sólo todo el día, sino todos los días de mi vida.

Si hoy es un día de desánimo, te invito a volver a leer el versículo y declarar por fe que confías en el Señor, toma la decisión de andar en obediencia, esa debería ser tu única preocupación, Dios se encargará de lo demás.

miércoles, 13 de agosto de 2014

PLAN EN EL CIELO

"¡Mira tú, ciudad afligida, atormentada y sin consuelo!
¡Te afirmaré con turquesas, y te cimentaré con zafiros!
Con rubíes construiré tus almenas, con joyas brillantes tus puertas,
y con piedras preciosas todos tus muros. 
El Señor mismo instruirá a todos tus hijos, y grande será su bienestar.
Serás establecida en justicia; lejos de ti estará la opresión, 
y nada tendrás que temer; el terror se apartará de ti,
y no se te acercará. Si alguien te ataca, no será de mi parte;
cualquiera que te ataque caerá ante ti"
Isaías 54:11-15


Hoy, con otra mirada, diferente a los días inmediatamente anteriores entiendo, convencida de que es revelación divina, que alguien muy interesado en mantenerme deprimida y distraída, el diablo, no porque simplemente su propósito sea robar, matar y destruir, sino porque ya supo que Dios va a hacer una obra maravillosa en mi vida y pretende estropearla, mi decisión es apoyarlo, si, leyó bien, apoyarlo o creerle al Dios verdadero, ahí está la diferencia.

Cuando el Señor regala una promesa tenemos dos alternativas: creer y esperar con fe o dudar y retrasar el plan, hoy decido creer y esperar con fe, esa es mi decisión, no porque todo de manera mágica haya mejorado, sino porque vuelvo a leer la porción de hoy y veo que en el cielo hay un plan perfecto diseñado para mi, porque el Creador, el arquitecto Mayor me ha mirado con amor y misericordia y hoy me dice que aunque me encuentre triste, Él tiene hermosos regalos que llegarán a medida que mi carácter sea formado a semejanza de Cristo, yo decido si mirar mis circunstancias o creer que lo mejor está por venir porque es Dios quien lo ha planeado, además la bendición no es sólo para mi, también para mi hijo, Dios no sólo tiene cuidado de mi sino de quien más amo.

El Señor conoce mi corazón, sabe mis luchas, entiende mi dolor, le importan mis procesos y por su gran amor está de mi lado, no porque lo merezca  sino porque me ama, así que hoy decido tener la mirada en el cielo, donde mi Señor ha trazado la mejor ruta de viaje, prosigo, decido dejarme usar para su Gloria y nuevamente le digo "Señor acá estoy, decido seguirte y servirte"

viernes, 8 de agosto de 2014

EL PELIGRO DE CRUZARSE DE BRAZOS

Pasé por el campo del perezoso, por la viña del falto de juicio.
Había espinas por todas partes; la hierba cubría el terreno,
y el lindero de piedras estaba en ruinas. 
Guardé en mi corazón lo observado, y de lo visto saqué una lección: 
Un corto sueño, una breve siesta, 
un pequeño descanso, cruzado de brazos... 
¡y te asaltará la pobreza como un bandido, 
y la escasez, como un hombre armado!
Proverbios 24:30-34

La uva es bastante importante en el proceso vinícola pues es la materia prima del mismo, por lo tanto su cultivo merece toda la atención y cuidado para lograr una bebida de excelente calidad, hay consideraciones tan importantes como la separación entre las líneas de cultivo pues tener plantas muy cerca puede producir frutos y racimos más pequeños, por eso quien cultiva debe estar pendiente de cada detalle; no descuidar la poda para controlar otras especies que pudieran crecer y dañar la cosecha. 

Dios utilizó la agricultura para darnos excelente ejemplos e instrucciones para nuestra vida, en el pasaje de hoy habló de las uvas, de los viñedos para explicarnos lo peligroso de la pereza. El protagonista hoy es el perezoso o, como lo llaman aquí, el falto de juicio, su viñedo estaba descuidado, el terreno había sido abandonado, este campo estaba a merced de la naturaleza porque su dueño no le dedicaba el tiempo necesario, tal vez lo que hizo fue plantar la semilla y se limitó a esperar la cosecha sin querer invertir ni tiempo ni recursos, por lo que leemos no fue mucho el tiempo de descuido, fue un pequeño descanso, bastó cruzar los brazos y llegó la ruina y la escasez.

Lo mismo sucede en nuestras vidas, en muchas ocasiones no valoramos los proyectos que Dios nos ha entregado para emprender, tratamos nuestro empleo o estudio con pereza y desidia; la cosecha de grandes frutos requiere esfuerzo, tiempo y dedicación, hoy día queremos tenerlo todo rápido, fácil, sin mucho trabajo, hay una pereza generalizada, la pujanza que otrora nos caracterizó parece haberse esfumado con la llegada de la postmodernidad; por eso el llamado de Dios a mantenernos alerta con la pereza, cuidado con las siestas, no hablo de aquellos momentos que sirven para recargar baterías, sino de las que nos empiezan a sumergir en un letargo del que ya no queremos levantarnos. 

SIN MIEDO

Cuando siento miedo,  pongo en ti mi confianza Salmo 56:3 Aún en medio de las batallas, David seguía alabando a Dios y tenía el tiempo para ...