martes, 11 de febrero de 2014

LE HABLO PORQUE LE CREO

Confiamos en Dios, pues sabemos que él nos oye, 
si le pedimos algo que a él le agrada.
Y así como sabemos que él oye nuestras oraciones, 
también sabemos que ya nos ha dado lo que le hemos pedido.
1 Juan 5:14 - 15


Hay una norma básica de educación y es escuchar a quien nos habla, nos gusta que nos escuchen, demandamos atención, no nos gusta ser ignorados, cuando alguien nos oye nos hace sentir importantes, en caso contrario, cuando hace caso omiso a lo que hablamos, nos molesta bastante, si notamos que alguien no nos está prestando atención mas bien callamos y dejamos de hablar. 

Es muy similar tener una conversación con Dios,  nos gusta que nos oiga, que nos preste atención y que nos responda, de hecho consideramos que Nuestro Padre Celestial nos ha escuchado porque recibimos respuesta a nuestra oración y es que orar es simplemente hablar con Dios y si le hablamos es porque creemos que nos escucha, de otro modo no nos dirijiríamos a Él, significa esto que si oro es porque le creo, eso es parte de la fe.

Ahora bien, no siempre el Señor responderá a tus peticiones como tu le has pedido, Él no va a complacerte en caprichos o en peticiones que puedan dañar a otros, por eso lo mejor es pensar bien lo que vamos a pedir, examinemos nuestras peticiones, pensemos si es agradable a Dios, si es beneficioso para mi y si no daña a otros, creo que es un buen filtro para empezar a hablar con Él, sin embargo aún si cumple con esto y no llega, no desfallezcas y no detengas tu oración, pide la dirección del Espíritu Santo y sigue creyendo que llega tu respuesta, pide también a Dios la paciencia y la sabiduría para entender cuando el dice ahora no, espera un poco o definitivamente no.

Disfruta de los SI de Dios y no te preocupes por los NO, finalmente es lo mejor para ti aunque no lo entiendas.

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