lunes, 20 de abril de 2015

SIEMBRA PERDÓN, COSECHA AMOR

El que perdona la ofensa cultiva el amor;
el que insiste en la ofensa divide a los amigos
Proverbios 17:9


Mucho se ha hablado del perdón: de su poder sanador para el ofendido, de la libertad que trae desprenderse del rencor, del perdón del Padre Celestial a tus muchas faltas, de lo inmerecido que en ocasiones resulta ser. 

Mucho se ha hablado del perdón... Así que si te insisten en un tema es porque tal vez no lo has aprendido o porque es bastante difícil entenderlo y más aún ponerlo en práctica.

Cuando perdonas reflejas que eres una persona de amor, alguien a quien le importa más el otro que el dolor propio, no te define el egoísmo ni la egolatría, valoras tanto a quienes amas que te desprendes de tu apetito de justicia, sin duda todo esto va en contra de tu naturaleza, debes esforzarte para perdonar mientras que sentir rabia, rencor y resentimiento no te significa ningún esfuerzo. 

Por otra parte, cuando insistes en la diferencia, cuando persistes en la pelea, cuando no superas el dolor terminarás siendo una persona solitaria, amargada, sumida en sus propios dolores y que a todo costa los demás quieren evitar; sin duda muchas veces te han ofendido y en gran manera, sin embargo la respuesta de una persona que ha decidido vivir con Dios debe ser el amor, no debe surgir de la necesidad innata de justicia porque finalmente el Señor te ha otorgado perdón sin merecerlo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

SIN MIEDO

Cuando siento miedo,  pongo en ti mi confianza Salmo 56:3 Aún en medio de las batallas, David seguía alabando a Dios y tenía el tiempo para ...