miércoles, 4 de septiembre de 2013

DIOS BUSCA LA RECONCILIACIÓN

Me habló una vez más el Señor, y me dijo: 
«Ve y ama a esa mujer adúltera, que es amante de otro. 
Ámala como ama el Señor a los israelitas, aunque se hayan vuelto a dioses ajenos y se deleiten con las tortas de pasas que les ofrecen.»
Oseas 3:1


Para contextualizar el verso de hoy es necesario decir que Oseas fue un profeta que Dios usó para dar palabras de advertencia y reprensión a Israel porque estaban viviendo una vida que desagradaba totalmente a Dios y su matrimonio fue el paralelo para dar dicho mensaje.

La esposa de Oseas le fue infiel, no una ni dos... sino varias veces, había decidido dejar la estabilidad y fidelidad que vivía al lado de su esposo por buscar una vida desenfrenada, sin embargo en este pasaje Dios le ordena a Oseas que la busque y se reconcilie con ella, no sabemos si ella estaba o no arrepentida, pero el Señor le pide al profeta que la ame, que busque reconciliarse con ella, el pecado de esta mujer fue la infidelidad y así somos nosotros con nuestro Padre, infieles, nos dejamos seducir por circunstancias o personas que nos alejan de Él, no le hablamos, no le obedecemos, nos da pereza leer su Palabra, no sacamos un tiempo para orar, nos da pena hablarle a otros de Él y decir que le creemos, sin embargo, Dios no nos responde con indiferencia, así como Oseas buscó y perdonó a su esposa, así Dios nos ama y busca reconciliarse con nosotros, todos los días nos está esperando para que le hablemos, para que le contemos que nos sucede, para que le pidamos lo que queremos y necesitamos.
El Señor no se va a cansar de esperarnos, pero no hay necesidad de prolongar esta reconciliación, te invito a que hoy le pidas perdón por haberlo ignorado y tomes la decisión de hacerlo el Señor y Salvador de tu vida.

Oración: Dios hoy quiero darte gracias porque eres fiel a pesar de mi infidelidad, gracias porque un día enviaste a Tu Hijo para que muriera en la cruz por mis pecados, gracias por tu perdón, hoy te pido que seas mi Señor y mi Salvador, entra en mi corazón y haz de mi la persona que tu quieres que sea, Amén. 

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