AMOR POR LOS DEMÁS

El que dice que está en la luz, y aborrece a su hermano, 

está todavía en tinieblas. El que ama a su hermano, permanece en la luz, y en él no hay tropiezo. 

1 Juan 2:9-10

Es increíble como el amor de los unos hacia los otros ocupa un lugar tan importante en el corazón de Dios, leemos hoy como mi amor por mi hermano es una evidencia de mi andar con Dios, de nada sirven los rituales, las reuniones, las obras benéficas hacia los más necesitados, las muchas oraciones sino amo a quienes tengo cerca, pretender ser una persona de fe sin amar a los demás es como intentar llenar un recipiente roto, imposible; a los primeros cristianos los diferenciaban por el amor fraternal y eso debería ser la constante entre nosotros.

Ahora... ¿Qué significa amar al hermano? significa que lo respeto, lo valoro y lo trato bien aún cuando algunas de sus actitudes me molestan o no estoy de acuerdo con su conducta, tengo derecho a no compartir los pensamientos de alguien, pero en ese caso debería estar molesta con la actitud, no con la persona, en ocasiones nos molesta mucho si alguien es distinto a nosotros, no soportamos la persona, nos incomoda siquiera que hable, eso es aborrecer la persona, debo aceptar la diferencia, tratar con amor el conflicto, pero no llenarme de sentimientos de rabia hacia los demás porque no hacen las cosas como yo quisiera o si me ofenden, no llenarme de rencor hacia la persona, simplemente molestarme por su ofensa, pero no con ella.

No trates de fingir, si te cae mal alguien, si no soportas a algún compañer@, si te desesperas por otra persona, no estás capacitado tampoco para amar a Dios, si no amas a quien ves, ¿cómo vas a amar al invisible?