Este es el camino, andad por él;
y no echéis a la mano derecha,
ni tampoco torzáis a la mano izquierda.
Isaías 30:21
Decidir nunca es fácil, al menos para la mayoría de personas, siempre existirá el temor a equivocarse y es porque nadie quiere elegir mal, es preferible no decidir, lo malo de eso es que si tú no decides otro lo hará por ti y eso puede resultar más frustrante.
¿Qué hacer cuando tienes que tomar cierta determinación? Muchas veces acudes al consejo de un bueno amigo y eso no está mal, sin embargo no debería ser lo primero porque esa persona es igual de limitada e imperfecta a ti así que sigue existiendo el riesgo a errar. Pero si empiezas pidiendo ayuda a Dios, seguro habrá un mejor panorama antes de cualquier disposición.
Acércate al Señor en oración, reconoce que necesitas que Él te hable, Él tiene respuesta y apoyo para ti. Cuéntale cuáles son los miedos que te embargan y las inquietudes que te asaltan. No escatimes en descargar todo tu corazón delante de Él, eso refleja confianza e intimidad, orar no es más que hablar sinceramente con el Creador, Él no se escandaliza de ninguno de tus sentimientos y emociones, con Él puedes ser sincero por completo, busca su dirección a través de su Palabra, siempre hallarás respuesta pero debes leerla, no hay otra forma. Por último Dios también puede hablar a través de las circunstancias y las personas, no temas en pedirle que envíe señales y muestras de cómo debes dirigirte, puedes también buscar consejo con personas que tengan también una buena relación con Dios.
Dios está interesado en tu vida, por eso no temas en buscar su guía para dilucidar tu futuro. Cuando decides confiar en Él escucharás su voz que te dirá: "Este es el camino"
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